La incisión transumbilical (TUBA, por sus siglas en inglés) no es muy común, pero muchas mujeres están interesadas en este método. Debido a que este procedimiento no deja cicatrices en el área de la mama, y en total tiene como consecuencia unas cicatrices mínimas, es una opción muy atractiva si se está considerando una cirugía de implantes de mamas. Aquí, explicamos algunos hechos básicos para analizar los que son parte de este estilo de procedimiento. Cicatrices: como ya hemos mencionado, las cicatrices son mínimas y lejos de las mamas. El médico hará una incisión alrededor del ombligo. Siendo tan pequeña esa zona, es improbable que se note. Si la cicatriz se nota, puede confundirse fácilmente con otra cosa.
Procedimiento fácil: este método es realmente un poco más difícil para el médico debido a la distancia entre el punto de ingreso hasta el lugar donde se pondrá el implante de mama. El cirujano tiene que utilizar un endoscopio para crear el camino para insertar el implante. El inconveniente de eso es que si el cirujano comete un error, se deberá hacer otro procedimiento, lo que resultará en una incisión en el área de la mama.
Colocación de los implantes: los dos lugares más comunes para colocar los implantes si se utiliza este procedimiento es arriba o abajo de los músculos pectorales. Tenga presente que debido a la distancia y el uso del endoscopio, puede resultar dificultoso colocarlos perfectamente. Esto no sugiere que la norma sean mamas torcidas, pero la dificultad agregada puede tener como consecuencia cirugías más largas o una recuperación más dolorosa.
Cada incisión tiene sus ventajas y desventajas y cada persona que experimenta una cirugía de mamas tiene que estar dispuesta a hacer un equilibrio entre unas y otras. Para cualquiera que piensa principalmente en las cicatrices de la zona de la mama, las incisiones TUBA y transaxilar son probablemente las mejores opciones.
Sin cicatrices en la mama con la incisión transaxilar
